Corre por tu vida!!!!
...Y llama a la Guardia Nacional!!!
Los mutantes atacan!!!
No desde el espacio exterior, sino desde las fábricas de automóviles justo aquí, en el planeta Tierra. Es hora de colocarse los lentes 3-D y observar algunas curiosidades de cuatro ruedas.
Por Lawrence Ullrich de MSN autos

Suzuki X-90
El X-90 tiene que haber sido el auto de producción más pomposamente bizarro de los últimos 20 años. Este anémico SUV mezcla con auto deportivo fue como una frase ingeniosa, pero sin el ingenio. Incluso su nombre de ciencia ficción recuerda la frase clásica de Marvin el marciano en Bugs Bunny: “¡Esa criatura me ha robado mi modulador espacial Suzuki X-90!”

AMC Pacer
Debo confesar que una vez conduje un AMC Gremlin naranja. Culpé a mi padre, que lo trajo a casa como si fuera un perro de tres patas abandonado. El Pacer era, si es que es posible, incluso más extraño que el Gremlin.
Viéndose como una burbuja tóxica salida de un canal industrial de Detroit, el Pacer también era solemne, lento, sediento de combustible, y ridículamente carente de espacio. En otras palabras, la idea de Motown de un auto económico.

Nitro
Espera un segundo, ¿no se llama nitro a algo inestable y explosivo? Bueno, ciertamente mis ojos arden cada vez que aparece el Dodge.
Como un Hummer hecho de muñecos G.I. Joe derretidos, el Nitro pertenece a esa vergonzosa raza de autos que intentan parecer costosos pero que cualquier curioso sabe que son más baratos que la tierra.
Añádele un manejo torpe y un mediocre mecanismo de transmisión, y el Nitro se conduce tan bien como se ve.

Chevy SSR
Difícil elegir entre el Lincoln Blackwood y el SSR. Pero nos quedamos con el SSR por crear esperanza con su apariencia de hot-rod, para desconcertar luego con un rendimiento cobarde, un convertible inseguro y un precio asombroso de $ 42,000. GM dijo haber construido más de 24000 SSRs entre el 2003 y el 2006, pero considerando los pocos que se han visto, me imagino que GM los debe haber enviado en secreto a algún país del Tercer Mundo.
Pero nos quedamos con el SSR por crear esperanza con su apariencia de hot-rod, para desconcertar luego con un rendimiento cobarde, un convertible inseguro y un precio asombroso de $42,000.

Mercedes R-Class
El poco vendido R-Class ha probado, como el Chrysler Pacifica antes que él, que el diseño de tres hileras con capacidad para seis pasajeros tiene sus problemas. El resultado es un SUV pesado, sobrevaluado y con un alto consumo de combustible que puede llevar sólo a cuatro adultos cómodos, no más de los que entrarían en un Honda Civic o cualquier otro auto compacto. No ayuda que el R-Class luzca como un coche fúnebre para cuerpos ricos. Con compradores congregándose alrededor de los modelos superiores GL y M-Class de Benz, Mercedes parece estar a punto de terminar con el sufrimiento del R-Class.

Isuzu VehiCROSS
Cuando Isuzu desarrolló el VehiCROSS en los Estados Unidos en 1999, algunos medios lo llamaron un diseño “adelantado a su tiempo” ¿A qué tiempo se referían? ¿A cuando Rosie O´Donnell vaya a ser elegida Miss Universo? El VehiCROSS tuvo un rol protagónico en el film Mission to Mars, un planeta que era más hospitalario para la aeronave lunar de Isuzu. Aquí en la Tierra, Isuzu se las ingenió para vender apenas 4000 unidades a los americanos en tres años. Uno de esos extraños VehiCROSS de hecho está estacionado en mi vecindario en Brooklyn. Hasta el día de hoy, las personas lo señalan y se ríen.

Pontiac Aztek
Hacer bromas con el Aztek es casi como burlarse de una persona discapacitada, por lo tanto estoy decidido a decir algo lindo. OK, aquí voy: lo de la pequeña tienda de campaña fue una buena idea. Y supongo que “Aztek” es mejor nombre que “Touareg” o “Tiguan”.
Pero no cabe dudas que el Aztek es, cuando menos, un auto raro.
Parece mentira que los mismo diseñadores del Firebird pudieran ingeniarse este armazón de metal sin sentido.

Buick Roadmaster
En 1991, el mismo año que comenzó la moda del moderno SUV con el nuevo Explorer de Ford, la gran idea de Buick fue el Roadmaster.
El Roadmaster pidió prestado su nombre a la década del 40, su panel de madera ficticia a los años 60 y su chasis a los años 70, probando que los vendedores de Buick estaban a tono con las últimas tendencias y tecnologías.
Un viaje en el asiento trasero flotante del Buick podía producir mareos instantáneos, y tomar una curva rápido se sentía como conducir un colchón de agua a 70 millas por hora.

Subaru Baja
Una vez no fue suficiente para Subaru, cuya monstruosidad previa, mezcla de auto con camión (el Brat), se convirtió en la carroza perfecta de los blancos pobres representados por el personaje de Jaime Pressly, Joy, en “My Name is Earl”.
El Baja, cerca de 2003-2006, era una ofensa para los ojos envuelta en plástico que reunía las peores características de los camiones pequeños y los autos.
Una flacucha e inútil plataforma de carga se combinaba con un estrecho asiento trasero y un motor de cuatro cilindros de potencia insuficiente.
El Baja en realidad andaba decentemente, pero ¿qué persona en su sano juicio se acercaría lo suficiente como para darse cuenta?
Una monstruosidad de auto que da mucho que pensar de aquel que haya cometido el error de comprar uno…
...Y a su criterio, cual es el auto mas raro????















