Un Citroen C2 en la Rally Dakar
Publicado: 08 Ene 2007 09:12
Para los que preguntaron por ese curioso auto..
EL CITROËN 2CV VUELVE A LA ARENA DEL DESIERTO
Una pareja de franceses quiere llevar este utilitario hasta Dakar. Con la llegada de las etapas africanas comienzan las complicaciones para ellos
El 2CV de Cyril Ribas llama la atención entre el resto de vehículos del parque cerrado.
El Dakar es la carrera de los imposibles, de los retos conseguidos y la lucha del hombre contra la naturaleza, pero siempre es más fácil con una mecánica considerable. Sin embargo, siempre hay en la carrera algún participante que pretende acabar con aparatos ciertamente dudosos. Si otros años estaba aquí el suizo Lanaro con su sidecar que nunca logró llegar a Mauritania, en esta ocasión quien protagoniza la galería de carromatos es el Citroën 2CV de los franceses George Marques y Cyril Ribas.
Ambos, que estuvieron presentes en el Dakar de 2005, cuando abandonaron en la etapa que acababa en Smara, en el Sahara Occidental, se han intercambiado posiciones. Entonces Marques era el piloto y ahora es Ribas quien pilota el coche y su compañero el que se ocupará de la navegación. El coche ha sido totalmente renovado con un nuevo chasis y un doble motor que ha ganado 30 caballos de potencia gracias a la utilización de materiales más ligeros y a un pequeño aumento de cilindrada de 602 a 652 centímetros cúbicos. Además cuentan con dos camiones de asistencia y cuatro mecánicos. "Nuestra intención es demostrar que con un coche que ha marcado una época, aunque no sea uno de los mejores, se puede llegar hasta el Lago Rosa. Será complicado, la última vez no tuvimos mucho éxito, pero en esta ocasión estamos más preparados", explica Marques.
El objetivo es llegar a Dakar en una aventura que cuenta con muchos adeptos en Francia, donde si acabaran se convertirían en unos auténticos héroes.
EL CITROËN 2CV VUELVE A LA ARENA DEL DESIERTO
Una pareja de franceses quiere llevar este utilitario hasta Dakar. Con la llegada de las etapas africanas comienzan las complicaciones para ellos
El 2CV de Cyril Ribas llama la atención entre el resto de vehículos del parque cerrado.
El Dakar es la carrera de los imposibles, de los retos conseguidos y la lucha del hombre contra la naturaleza, pero siempre es más fácil con una mecánica considerable. Sin embargo, siempre hay en la carrera algún participante que pretende acabar con aparatos ciertamente dudosos. Si otros años estaba aquí el suizo Lanaro con su sidecar que nunca logró llegar a Mauritania, en esta ocasión quien protagoniza la galería de carromatos es el Citroën 2CV de los franceses George Marques y Cyril Ribas.
Ambos, que estuvieron presentes en el Dakar de 2005, cuando abandonaron en la etapa que acababa en Smara, en el Sahara Occidental, se han intercambiado posiciones. Entonces Marques era el piloto y ahora es Ribas quien pilota el coche y su compañero el que se ocupará de la navegación. El coche ha sido totalmente renovado con un nuevo chasis y un doble motor que ha ganado 30 caballos de potencia gracias a la utilización de materiales más ligeros y a un pequeño aumento de cilindrada de 602 a 652 centímetros cúbicos. Además cuentan con dos camiones de asistencia y cuatro mecánicos. "Nuestra intención es demostrar que con un coche que ha marcado una época, aunque no sea uno de los mejores, se puede llegar hasta el Lago Rosa. Será complicado, la última vez no tuvimos mucho éxito, pero en esta ocasión estamos más preparados", explica Marques.
El objetivo es llegar a Dakar en una aventura que cuenta con muchos adeptos en Francia, donde si acabaran se convertirían en unos auténticos héroes.
