La marca alemana BMW ha logrado recuperar un récord Guinness que antes era de su propiedad, se trata del auto capaz de realizar el drifting más largo, logrando en esta oportunidad hacerlo por 374 kilómetros.
El récord anterior había sido establecido por la marca Toyota a bordo de un GT86, que impuso la cifra de 165 kilómetros rompiendo en ese momento un récord de 82 kilómetros que había impuesto BMW en un M5.
Para establecer el nuevo récord el nuevo BMW M5 derrapó por más de ocho horas consecutivas en una pista acondicionada para tal objetivo de asfalto mojado con poca adherencia.
Las reglas del récord Guinness permitían detener el auto para repostar gasolina, sin embargo, BMW fue espectacular y al mejor estilo de una película de acción lo ha hecho diferente al llenar su tanque en movimiento.
Se realizaron cinco repostajes de gasolina durante las ocho horas en un BMW M5 F10 conducido por el piloto Johan Schwartz y adaptado para tal fin.