El estadounidense Marco Andretti ratificó este domingo su dominio en los ensayos previos a la edición 104 de las 500 Millas de Indianápolis al superar el neozelandés Scott Dixon y firmar la ‘pole position’ en la Indianápolis Motor Speedway.
Por primera vez un piloto de Andretti Autosport logra la pole en 33 años en el Brickyard cuando el legendario abuelo de Marco, Mario, se clasificó primero en 1987.
«Fue increíble», declaró Marco al dar crédito a su abuelo por un consejo crucial: «el viento te asustará, pero no te estrellará». Esto en alusión a los vientos cruzados que se dieron este domingo en el óvalo de 2,5 millas (4,023 kilómetros)
Andretti, cuyo mejor comienzo anterior en Indy fue tercero en el 2013, logró un promedio de cuatro vueltas a 231,068 mph (371,867 kilómetros) en su Dallara-Honda No. 98 para la sexta ‘pole position’ de su carrera y la primera desde el 2018.
Ahora tratará de igualar a su abuelo, que ganó en 1969, como el segundo Andretti en proclamarse campeón en el «Gran Espectáculo del Automovilismo». Su padre, Michael, no tuvo victorias en 16 carreras en la Indy 500.
Dixon fue segundo, seguido por el mejor puesto de largada en Indy para el ganador de 2017, el japonés Takuma Sato.
El holandés Rinus VeeKay, de 19 años, fue el primer Chevrolet en cuarto lugar después del mejor esfuerzo de calificación de un adolescente en la historia de la Indy 500.
Marco Andretti también superó a otros tres compañeros de Andretti Autosport en los ‘Fast Nine’, ya que Ryan Hunter-Reay (quinto), el canadiense James Hinchcliffe (sexto) y Alexander Rossi (noveno) bajaron la velocidad después de que barrieron los cuatro primeros lugares en la clasificación provisional.
Andretti no perdió su ritmo después de dar las vueltas más rápidas en los últimos dos días en el Indianapolis Motor Speedway, donde los pilotos recibieron 50 caballos de fuerza más con un impulso turbo obligatorio para las configuraciones de calificación de la NTT IndyCar Series que alcanzaron velocidades por vuelta a más de 230 mph (370,149 kilómetros).