
Uno de los vehículos más agresivos, impactantes, llamativos y a la vez curiosos de cuantos se pueden ver en el Salón del Automóvil de París lleva la marca de Peugeot. Se trata del 908 RC, un modelo muy especial que causa expectación e incluso, casi me atrevería a decir, miedo.
El Peugeot 908 RC está claro que crea una atmósfera ciertamente siniestra, pero a la vez, levanta pasiones. Un sedán de líneas futuristas y a la vez retro, con cromados por doquier y un color negro que plasma elegancia.
Por supuesto, todo ese aspecto tan agresivo se ve acompañado de un motor de primera línea. Se trata de un 5.5 V12 HDI con nada menos que 700 CV de potencia, que asimila una caja de cambios secuencial de seis velocidades.
Construido con un compuesto que mezcla aluminio y carbono, este sedán es capaz de lanzarse por encima de los 300 km/h y cubrir el kilométro desde parado en apenas 22 segundos.
La sofisticación también llega a los frenos, cerámicos y de gran diámetro, que aseguran que los más de cinco metros de automóvil se detienen en distancias francamente cortas. Destaca el uso de seis pistones delante y cuatro detrás, por supuesto, firmadas por Brembo, toda una garantía.






