En 1981, cuando el GTI se tenía que conformar con ser el sueño de los entusiastas estadounidenses, Bill Neumann, fundador de Neuspeed, metió un Rabbit en su garaje y no salió de él hasta que terminó su propia versión. Y así fue como nació el Thunder Bunny, una preparación extraordinariamente popular por su potencia y sentido práctico, que entusiasmó a los conductores que buscaban algo pequeño, pero también rápido. Tan solo un año después VW lanzó en GTI en Estados Unidos. ¿Coincidencia? No lo parece.
Ahora, 25 años después, VW ha hecho equipo con Neuspeed para recordar al Thunder Bunny original con un muy pulido modelo conceptual expuesto en el SEMA. Esta nueva versión añade un turbo al animoso motor de 2,5 litros y 5 cilindros de Volkswagen, subiendo su potencia de 150 a 225 caballos. Fuera del capó, vemos que la parte delantera ha recibido una nueva parrilla más agresiva, y unos dibujos grises recorren los laterales "parpadeando" dependiendo del ángulo desde el que se mire al compacto (el efecto se aprecia algo mejor en las fotos oficiales que hay tras el enlace). Amortiguadores Bilstein, frenos Brembo y llantas de aleación doradas terminan de poner el broche a un modelo tan sobrio como bonito, y que demuestra que en el SEMA también hay hueco para cosas menos escandalosas.
