Por la forma del techo, a un servidor le recuerda a coches como el Porsche Carrera GT o el Ferrari F50, siendo un descapotable "curioso", menos abierto que un 360, por ejemplo, y con un abatimiento muy similar al de un Renault Wind.
Debido al sistema de plegado (tienes un vídeo tras el salto), el coche pierde la luna trasera sobre el motor, por lo que el V8 y sus colectores de fundición quedan ocultos a los ojos de los viandantes.
El coche sólo pesa 50 kilos más que la versión cerrada, gracias a un techo de aluminio, y a un mecanismo de plegado tan sencillo que pesa 25 kilos menos, según Ferrari, que un sistema equivalente con lona.
El techo se repliega en 14 segundos, y las prestaciones del coche en cuanto a aceleración se mantienen intactas (3,4 en el cero a cien), aunque pierde velocidad punta (más de 320 por hora aun así) debido a la nueva configuración aerodinámica. Según Ferrari, se puede mantener una conversación sin alzar la voz a 200 por hora con el techo abierto, gracias a la estudiada aerodinámica. La duda que nos queda es si resultará tan "abierto" como cuando conduces un descapotable donde no hay tantos elementos elevados alrededor de tu cabeza, pues a mí me da la ligera sensación de que en este coche te sentirás más como en un targa tipo F50, donde no tienes la sensación de "cabellera al viento" de un Maserati GranCabrio o un Ferrari California. Pero es que para eso existe el California...
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